Cómo prevenir golpes de calor y hacer frente a las altas temperaturas

Las altas temperaturas llegaron para quedarse al menos varios días y las autoridades advierten por los posibles golpes de calor que pueden causar problemas en la salud de las personas.

Frente a la ola de altas temperaturas, los especialistas emitieron una serie de recomendaciones para evitar sufrir un golpe de calor: tomar abundante agua durante el día; consumir alimentos frescos, como frutas y verduras; evitar las bebidas alcohólicas y azucaradas e infusiones calientes; vestir ropa de colores claros; utilizar protector solar; y evitar la exposición al sol entre las 11:00 y las 16:00.

Asimismo, subrayaron que el cuidado debe intensificarse en los bebes y adultos mayores. En cuanto los pequeños, se aconsejó «ofrecer el pecho de manera más frecuente, mantenerlos en lugares frescos y ventilados, bañarlos y mojarlos, vestirlos con ropa holgada y liviana y nunca permanecer con ellos dentro de un vehículo cerrado». Además, se recomendó «hidratar continuamente a niños y niñas, especialmente con jugos naturales, regular sus actividades y vestirlos con ropa fresca y clara».

Respecto al cuidado de los ancianos, señalaron que es ideal «regular las actividades físicas» y hacerlo «en horarios adecuados, evadiendo picos de altas temperaturas y sensación térmica; tomar abundante líquido antes, durante y después del ejercicio; y protegerse adecuadamente de las radiaciones solares». También se sugirió evitar las bebidas con alcohol ya que aumentan la temperatura corporal y consecuentemente la pérdida de líquidos.

¿Qué es un golpe de calor?

El golpe de calor consiste en el aumento de la temperatura del cuerpo por una exposición prolongada al sol -conocida como insolación- o por realizar ejercicios en ambientes calurosos o con poca ventilación, lo que provoca la pérdida de agua y sales esenciales para su buen funcionamiento. Ante estas circunstancias, el cuerpo manifiesta dificultades para poder regular su temperatura por mecanismos habituales como la sudoración, motivo por el cual se genera un aumento de la temperatura corporal.

El golpe de calor puede presentarse en el momento o después de varios días de alta temperatura. Respecto a los principales síntomas se destacan la sed intensa y sequedad en la boca; una temperatura corporal mayor a 39º C; la sudoración excesiva; una sensación de calor sofocante; piel seca; agotamiento, cansancio o debilidad; mareos o desmayo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *